Tres toletes y 1/2

lunes, 16 de febrero de 2009

Pasó el 15 de febrero y todo parece indicar que las cosas vuelven a la modorra tranquilidad, total una tercera parte del electorado venezolano parece que le importa solo vivir tranquilo, diciendo déjenme quieto que yo no me meto con nadie; como me acuerdo en estos momentos del tema del postmodernismo de Virulo. ¿Qué se puede esperar? el venezolano es así, juega siempre al mejor postor y cuando no le conviene se hace el "willy". Allí están los 5 millones que no votaron.

Números descalabrados para los otros dos toletes, 6 millones a favor por un lado, que viendolos con la lupa del comportamiento electoral para el chavismo, se podría decir que más que una victoria obviamente por ser la mayoría, parece ser el comienzo de un estancamiento y que comienza a mostrar signos de caída libre. De aquí al 2012 muchos gallos cantan y los cobres se están acabando, diría mi abuela.

5 millones... ¿perdidos? para nada!!, lo que el chavismo perdió la oposición los ganó. Por primera vez se supera la barrera de los 5 palos de habitantes que terminan por definir un disgusto con el proyecto de Hugo Chávez. Las ganas de cambio se asoman con mas claridad en estos días, pero ojo, yo no los veo en estas caras que aparecen por Globovisión... de aquí al 2012 tambien amanecerá y veremos.

Y por ultimo queda el contingente de relevo repartido en el resto de la población que no es votante por no ser ciudadanos y ciudadanas mayores de edad. Dependerán de su paso por las universidades (los que lleguen) o más bien por el libro de la vida que se conoce en la calle, en el barrio, en la cuadra, y esta se dá a medir con los termómetros de la capacidad para analizar porque sucede la pobreza, la inseguridad y otra pila de cosas que si Chávez no las resuelve en lo que le queda, seguramente los que ya pican los 14 años de edad irán moldeando un candidato que aun no existe para confiar en que este si lo pueda hacer. Del dicho al hecho, bastante trecho que pasa.

Mi esposa me lo contaba ayer antes de dejarla en el centro de votación, "no se porque se me hace que hoy gana el SI, pero también se me hace que Chávez no llega al 2012", la escuché y su tono me provocó escalofrio. Ella poco se equivoca en las cosas que analiza, ojala y sus predicciones no las termine de aligerar la intolerancia y el desgaste político que la tenemos acumulada como buenos acaparadores de emociones.

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